" En los años 1934 y 1935, empezaron las
primeras repoblaciones de varias especies de árboles; la mayoría de los obreros
que trabajaron en esta plantación eran marineros y agricultores, estando de
capataz Juanito Amat.
El forestal Gonzalo Guerreiro, era
muy amigo del personal obrero, cuando los marineros no iban al mar los iba a
buscar al muelle de Viveiro, para trabajar en los montes y les pagaba 4
pesetas por día (50 céntimos la hora).
Dicho forestal era un gran cosechero de
viñedos en su tierra natal (Ourense) y de vez en cuando le regalaba vino al
personal obrero ".
(Amador López Albo ex-Agente Forestal durante 40 años, nos lo cuenta en su libro "La experiencia de una vida en el campo").